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lunes, 27 de agosto de 2018

Posesión espiritual

Si alguien alguna vez imagino echar un vistazo al Paraíso este es su momento. La imagen aporta una porción de esa tierra divina la que como advertirán está y es ocupada por cantidad de actores, varios de los cuales tienen semejanza con los difundidos por diversos cultos.
La realidad está en el aire y en la vegetación, ese follaje que tantas veces incomoda tiene  vital importancia para la existencia, en el conviven diversidad de seres, muchos de los cuales son los que atienden nuestras frecuentes peticiones.
Amoldarnos a un planeta vivo, acomodarnos sin despreciar a otros seres vivientes va a hacer de nosotros auténticos seres humanos.
-El rostro de Ana se encuentra poseso, el espíritu de una mujer tomo su lugar siendo una dama conocida de la población queriendo llegar a los suyos con el mensaje, así sea.-
Buena vida
Pablo y Ana Borsani






domingo, 12 de julio de 2015

Con el ojo del alma

La imagen nos permite notar un individuo que, ubicado sobre mi cabeza media ante los seres que saludamos. Tal vez se descubra ante nosotros aquello que diversas culturas nombraron tercer ojo o  Ajna, chakra ubicado en el centro de la frente asociado con el Espíritu, el lugar donde están nuestras verdaderas motivaciones conocidas como subconsciente o inconsciente,  zona relacionada asimismo con la espiritualidad. El ojo del alma
Los dos ojos dan dimensión en el mundo normal, el tercer ojo da la visión de los mundos sutiles. Su función es ver lo invisible y conocer lo desconocido.

Porque nadie puede saber por ti. Nadie puede crecer por ti. Nadie puede buscar por ti. Nadie puede hacer por ti lo que tú mismo debes hacer. La existencia no admite representantes. Jorge Bucay (1949-?) Escritor y psicoterapeuta argentino.
Buena vida
Pablo y Ana Borsani 



jueves, 12 de febrero de 2015

El abuelo de barba blanca.

Desplazándose entre el aire libremente, tan sutiles como un suspiro, así como un ave que demanda de un punto de apoyo luego del fatigoso vuelo, los volátiles espíritus al igual lo requieren.
Observamos siluetas adheridas a cada punto solido que se halle en el camino, arboles, plantas, muros y así hasta en la misma superficie del suelo, por elección solides natural, de considerarlo conveniente permanecen prolongado tiempo, si bien por momentos se alejan, regresan repetidas veces.
En la imagen observamos espíritus posesos sobre cuerpos naturales, en este caso hierbas, bien pueden no tratarse de energías humanas, existen variedad de géneros, la zona espiritual no es exclusiva del ser humano.
La fotografía que mostramos carece de retoques, es la razón por la cual será provechoso aguzar la mirada para sentirse transportados a un territorio de maravillas, un terreno en donde diferenciaremos inclusive a un elegante abuelo de barba blanca y gorro oscuro sentado en la base del árbol, abuelo que atraviesa las páginas de aquellos magníficos cuentos de nuestra infancia para mostrarse tan real como nosotros mismos.
La investigación no solo transfiere conocimiento, en ocasiones añade fascinación.
Buena vida
Pablo y Ana Borsani

martes, 10 de febrero de 2015

Posesión

El término posesión, por definición indica “tenencia o propiedad de algo”, aunque sí de cuestiones espirituales se trata su interpretación es “el dominio del espíritu del hombre por otro espíritu”. Ocupándonos de este último debemos aclarar que se suceden en multiplicidad de formas. Podemos ser posesos aun sin tomar conocimiento del hecho, virtualmente atribuyéndolo a nuestra autoría, lo cierto es que hay quienes consiguen intervenir en sueños, pensamientos, escritura, visión, actos y apariencia, a este último punto hace referencia la  fotografía de hoy, imagen en la que apreciamos un rostro muy diferenciado para la realidad de Ana.
Claro está que las mencionadas acciones se mantienen tremendamente alejadas de aquello que nos cuentan ciertos interlocutores que obtienen provecho de lo que aun para ellos mismos es ignorado, aterrando al incauto. No podemos desconocer que aunque de otra conformación el ser que se allega es un igual, apartado de complacencias carnales y posesiones, sin más beneficio que el solo hecho de estar, individuos que en la mayoría de los casos han asumido significado en nuestra existencia carnal y claro está, continúan participando desde el anonimato e incorporando un poco de allá a nuestras vidas, entre otras bondades  algo de aquello que valoramos como intuición es parte.
Coexisten múltiples personajes en el universo espiritual, de ellos nos ocuparemos próximamente.
Buena vida
Pablo y Ana Borsani


martes, 16 de diciembre de 2014

Posesión espiritual.

La forma en que una persona de allá, individuo que al poseer una composición diferente a la nuestra se vale en este caso de un cuerpo, mi perfil, el que lo asiste para recrearse, alcanzando hacerse visible para quienes saben mirar,  y es que mientras que ver es exclusivamente quedarse con lo superficial, mirar es tomar parte de la forma, del alma, del interior, de la esencia misma de la cosa. En cantidad de ocasiones advertimos figuras en la niebla, rayos solares, humo, arboles e infinidad de substancias las que facilitan una plataforma más firme que el mismo éter para manifestarse, algo similar a un vidrio que al empañarse deja al descubierto huellas que antes no eran visibles. Personajes con igual realidad que cualquiera de nosotros, sin más que recorriendo diferente zona del camino, lo que algunos despectivamente nombrarían fantasma, claramente seres humanos, antecesores de nosotros. La actitud de cada espíritu, a la que muchos le han hecho mala fama,  difiere acorde a como haya reaccionado al cambio la persona, hay quienes lo asumen con naturalidad y los hay malhumorados, insatisfechos con su evolución,  apresurados por regresar, incluso con tareas que ultimar, familia, etc. ello los convierte en seres fastidiosos, especialmente con ellos mismos ya que ahora con este avance poseen limitaciones importantes en cuanto a su intervención en "este mundo", se los puede reconocer por el rostro enojoso.
Buena vida
Pablo y Ana Borsani